No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí. Juan 14:1

¿Qué es un corazón turbado? ¿Cómo reaccionamos cuando estamos turbados?

La diferencia es que somos gente de fe y cuando hablamos de fe es cuando tenemos nuestra confianza en Dios.

Dios no quiere que te turbes, el quiere que tomes actitud de creerle; de creer en Jesús, de creer en la palabra y hoy mas que nunca debe de creer en su palabra.

Debemos caminar creyendo en las promesas de Dios para que no nos afecte en nuestra vida espiritual.

Esto es lo que esta ocurriendo, todas las noticias, el Internet todo se habla de la pandemia “Coronavirus” y eso debilita nuestra fe, todo esto nos desespera, porque vemos que no es en un solo lugar sino en diferentes lugares y eso es lo que pasa cuando escuchamos en cada momento en las noticias y nos repiten lo mismo y el cristiano es afectado en su fe, pero Jesús nos dice que no nos turbemos, que no nos llenemos de pánico, que no nos llenemos de ansiedad, que no tengamos miedo, si no que tengamos confianza en lo que Dios nos a prometido a cada uno de nosotros.

Acontecerá que si oyeres atentamente la voz de Jehová tu Dios, para guardar y poner por obra todos sus mandamientos que yo te prescribo hoy, también Jehová tu Dios te exaltará sobre todas las naciones de la tierra. (Deuteronomio 28:1)

Nuestra esperanza no esta aquí en la tierra, veremos muchas cosas cumplirse pero nosotros debemos vivir con la fortaleza de Dios creyendo en lo que El ha prometido porque El es nuestro escudo, nuestra esperanza, porque El es nuestra salud, porque El es nuestro amparo, nuestro abrigo, y nuestra fuerza.

Los que están cubiertos con la sangre de Cristo tienen los cielos abiertos porque nosotros somos peregrinos en esta tierra y tenemos una esperanza viva que es el Señor.

El problema de todo ser humano es el pecado, pero Dios lo resolvió a través del hijo de Dios. Cuando usted y yo reconocemos nuestros pecados y lavamos nuestros pecados en la sangre de Jesucristo, tiene que haber en nosotros ese arrepentimiento de nuestros pecados, acercarnos a Dios creyendo que en su muerte hay vida eterna, en su muerte hay perdón de pecados, en su muerte somos redimidos, en su muerte somos liberados de la esclavitud, del pecado y de la muerte y de toda condenación.

JUSTIFICADOS pues por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo: Por el cual también tenemos entrada por la fe a esta gracia en la cual estamos firmes, y nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios. (Romanos 5:1-2)

Continuación en verso 2 de Deuteronomio: Y vendrán sobre ti todas estas bendiciones, y te alcanzarán, si oyeres la voz de Jehová tu Dios.

Dios lo ha escogido para que lo represente, hay que tener algo de Dios en nuestro corazón para que se parezca a El; para que hable como El, para que camine como El, para que actúe como El, para que haga las cosas como El.

SABIDURIA

Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada. Santiago 1:5

Al que le hace falta sabiduría (vivir en prudencia oh vivir correctamente) pídala.

Hermano el evangelio no es solo de brincar, hablar lenguas, es de vivir con Dios, caminar con El, de tener confianza en El, de escuchar Su voz, de que guíe nuestra vida. El salmista dice:

Busqué a Jehová, y Él me oyó, y me libró de todos mis temores. (Salmos 34:4)

Así decía el salmista porque tenía una relación con Dios, el problema es que no queremos aprender a tener una relación mas fuerte, somos muy superficiales, solo tenemos una relación cuando lo necesitamos y decimos “necesito algo de Dios” entonces me voy de rodilla pero no es así; es una comunión en cada momento con tu Dios, caminar, hablar con El en el carro, donde quiera que estés hablar con El, Cuando hay dudas hay que hablar con El.

Un hijo de Dios es señalado, sellado, apartado, se guarda, es especial para Dios. Tú te tienes que sentirte de esa manera porque vales la sangre de Cristo. Tu estas marcado por El, El espíritu De Dios vive en cada creyente.

Me desespero y me turbo por lo que escucho, cuando no escucho la promesa de Dios.

Aunque ande en valle de sombra de muerte, No temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo; Tu vara y tu cayado me infundirán aliento. Aderezas mesa delante de mí en presencia de mis angustiadores; Unges mi cabeza con aceite; mi copa está rebosando. Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida, Y en la casa de Jehová moraré por largos días. (Salmos 23:4-6)

Vive bajo la promesa, creele a Dios. Dios esta contigo y quiere ayudarte siempre.

Pastor Silvio Tellez
Ministerio Internacional Jesús Es Luz